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jueves, 28 de octubre de 2010

Sobre el Plan Bolonia...

Queridos lectores,

He aqui una explicación "sin rodeos" sobre el Plan Bolonia. La explicación está dada por el decano Juan Carlos Mejuto de la Universidad de Vigo.


Esta es su opinión y...¿la vuestra?

miércoles, 27 de octubre de 2010

Otra manera de contar un cuento...

Queridos lectores,

Hace un año ayude a unos amigos a realizar un corto basado en un cuento para niños. El titulo del cuento es “El topo que quería saber quien se había hecho aquello en su cabeza”. El autor del cuento es de Werner Holzwarth y narra la historia de un topo el cual una mañana sale de su madriguera con tan mala suerte que le cae un deshecho en la cabeza. El topo decide saber quien se ha hecho eso en su cabeza preguntando a todos los animales que se encuentra. Finalmente, unas moscas le dan el veredicto; fue el perro. El topo se dirige a donde éste y le devuelve “la broma”.

Los animales están hechos con plastilina, y no está captado con video. Para poder generar el movimiento de los personajes tuvimos que realizar una foto por cada movimiento, para después montar una sucesión de imágenes y que así los personajes de plastilina tomasen vida. Más de 1.000 fotografías fueron utilizadas.

Espero que les guste el cuento.

martes, 26 de octubre de 2010

El niño

Queridos lectores,

“El niño” es un cuento que ayuda a reflexionar sobre el arte de enseñar, de cómo se ha de hacer. La autora es Helen E. Buckley.


"Una vez un niño fue a la escuela. Él era bien pequeño. Y la escuela era bien grande. Pero cuando el niño vio que podía ir a su clase caminando directamente desde la puerta de afuera, él se sintió feliz, y la escuela no le parecía tan grande así.
Una mañana, cuando hacía poco que él estaba en la escuela, la maestra dijo: 
  • Hoy vamos a hacer un dibujo
  • Bien –pensó él.
A él le gustaba dibujar. El podía hacer todas las cosas: leones y tigres, gallinas y vacas, trenes y barcos..., y tomó su caja de lápices y comenzó a dibujar. Pero la maestra dijo: 
  • ¡Esperen! ¡No es hora de comenzar!
Y él espero hasta que todos estuviesen prontos.
  • ¡Ahora! –dijo la maestra- Vamos a dibujar flores
  •  ¡Bueno! –pensó el niño.

A él le gustaba dibujar flores con lápiz rosa, naranja, azul. Pero la maestra dijo:
  • ¡Esperen! Yo les mostraré cómo se hacen. ¡Así! –dijo la maestra, y era una flor roja con tallo verde
  • ¡Ahora sí! – dijo la maestra - Ahora pueden comenzar.
El niño miró la flor de la maestra y luego miró la suya. A él le gustaba más su flor que la de la maestra. Pero él no reveló eso. Simplemente guardó su papel e hizo una flor como la de la maestra. Era roja, con el tallo verde.
Otro día, cuando el niño abrió la puerta de afuera, la maestra dijo:
  • Hoy vamos a trabajar con plastilina.
  • ¡Bien! –pensó el niño.
El podía hacer todo tipo de cosas con plastilina: víboras y muñecos de nieve, elefantes y rabitos; autos y camiones... Y comenzó a apretar y amasar la bola de plastilina, pero la maestra dijo:
  • ¡Esperen! No es hora de comenzar. Y él esperó hasta que todos estuviesen prontos. 
  • ¡Ahora! –dijo la maestra- nosotros vamos a hacer una víbora.
  • Bien, pensó el niño. A él le gustaba hacer víboras.
Y comenzó a hacer unas de diferentes tamaños y formas. Pero la maestra dijo:
  • ¡Esperen! Yo les mostraré cómo hacer una víbora larga.
  • ¡Así! –dijo la maestra - Ahora pueden comenzar.
El niño miró la viborita de la maestra. Entonces, miró las suyas. A él le gustaban más las suyas que las de la maestra. Pero no reveló eso. Simplemente amasó la plastilina, en una gran bola e hizo una viborita como la de la maestra. Que era una viborita larga.
Así luego el niño aprendió a esperar y a observar; y a hacer cosas como la maestra, y luego él no hacía las cosas por sí mismo.
Entonces sucedió que el niño y su familia se mudaron para otra casa, en otra ciudad y el niño tuvo que ir a otra escuela.
Esa escuela era mucho mayor que la primera, entonces había puertas afuera. Para llegar a su salón, él tenía que subir algunos escalones y seguir por un corredor largo para finalmente llegar a su clase.
Y justamente en el primer día, que él estaba allí, la maestra dijo: 
  • Hoy vamos a hacer un dibujo. 
  • Bien –pensó el niño. Y esperó a la maestra para que le dijera cómo hacer.
 Pero ella no dijo nada, apenas andaba por el salón. Cuando se acercó al niño, ella dijo: 
  • ¿Tú no quieres dibujar?
  • Sí –dijo el niño-. Pero ¿qué vamos a hacer?
  • Yo no sé, hasta que tú lo hagas –dijo la maestra.
  • ¿Cómo lo haré? –preguntó el niño.
  • ¿Por qué?- dijo la maestra- De la manera que tú quieras.
  • ¿Y de cualquier color? –preguntó él.
  • De cualquier color –dijo la maestra-. Si todos hiciesen el mismo dibujo y usasen los mismos colores, ¿cómo yo podría saber quién hizo qué, ¿y cual sería de quién?.
  • Yo no sé- dijo el niño. Y comenzó a hacer una flor roja, con el tallo verde."

lunes, 25 de octubre de 2010

Ojos de niño

Queridos lectores,

Como hace unos días, vuelvo con Frato. La verdad es que las caricaturas que hace realmente están bastante bien para realizar una crítica.

En la imagen podemos ver a los niños que están en el tiempo del recreo en el patio, y se les ve debatiendo, conversando sobre si es un reactor o no. Suena el timbre y vuelven al edificio para reanudar las clases.

De esta imagen podemos interpretar varias cosas: los niños se encuentran fuera del edificio debatiendo sobre algo que parece que les interesa y más o menos dominan, sobre un tema de actualidad y lo hacen en el momento y lugar en el que el maestro no puede verlos, es decir, en la hora del recreo. Hay un cambio de papeles, el aula debería ser este lugar donde se tratan temas de actualidad mediante el debate y la discusión pero no es así.

Por otro lado la disposición de los niños en el recreo es mirando al cielo como si fuese un gesto de fantasía, como si estuvieran imaginado o soñando hacer cosas interesantes más allá de los “muros de la escuela”. En el patio parecen entretenidos con el tema del avión y cuando suena la campana vuelven dentro pero con otro animo totalmente distinto, vuelven cabizbajos como sin ganas de continuar con lo que les espera dentro, mostrando de esta forma la poca predisposición por el interés hacia la escuela y más sobre el tema libre.

También quedan reflejados el tema de los tiempos de trabajo descanso dentro de la escuela, no sabemos si en el momento en que salieron los niños estaban cansados o si necesitan el recreo en otro momento y de más o menos duración.