vuelvo con un articulo interesante del periódico "El Pais": DE ISLOTE A CONTINENTE.
Las instituciones actuales, concretamente la universidad pretenden vincular dos conceptos cercanos entre si como son investigación y enseñanza promoviendo un modelo educativo centrado en la clase magistral, los apuntes, el estudio de estos y el aprobado/suspenso en su correspondiente prueba evaluativa. Justo lo contrario de lo que viene caracterizando a la docencia: el descubrimiento guiado, la reflexión y el cuestionamiento de conocimientos.
Esta practica docente unidireccional se mantiene desde la edad media hasta nuestros días centrándose en el conocimiento como pilar inamovible, indiscutible y definitivo. Lo cual reduce el aprendizaje a la mera absorción sin filtros de dichos saberes. Es lo que el autor denomina saber continental sólido e indiscutible. En oposición a este saber tradicional, continental, se presenta otro conocimiento contrapuesto totalmente. Un conocimiento que viene a ser “un archipiélago en un mar de ignorancia”.
Los conocimiento actuales se vienen clasificando en categorías de carácter estanco por orden de instituciones y leyes educativas, cuando diariamente encontramos aspectos de una determinada materia con un fondo multidimensional que guardan estrechos lazos de unión y de dependencia con otras disciplinas.
La universidad que se pretende alzar en nuestros días no base pues su misión en la simple transmisión de saberes, saberes que podrían ser extraído fácilmente de cualquier manual o libro, sino que se basa en la relación, que inicialmente se planteaba, entre investigación y enseñanza bajo una única normal esencial: el cuestionamiento de cuestiones, enseñar a dudar.
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